El runrún de las gafas de realidad mixta de Apple llevaba años produciéndose, y es ahora cuando al fin tenemos con nosotros las Vision Pro. Somos varios los que en el equipo de Xataka y Applesfera las hemos probado —
Pedro Aznar,
Javier Lacort,
Isra Fernández,
Mario Arroyo, y
quien suscribe esta newsletter— y por fin hemos podido experimentar de cerca si la propuesta de Apple es o no realmente disruptora.
Aquí hay opiniones para todos los gustos: yo soy más escéptico y de hecho creo que aunque Apple se ha puesto por delante, esto son unas gafas de realidad mixta con ínfulas. Más caras y lógicamente más avanzadas, son ciertamente espectaculares en pequeños ámbitos o en avances
como el reconocimiento gestual. Pero en mi opinión
casi todo lo que ha hecho Apple es replicable, y solo espero que este mercado se anime y aparezcan alternativas que aprovechen algunas de las (viejas) ideas reimpulsadas por la firma de Cupertino.
Lo que está claro es que el producto ha generado una expectación sin igual. En Estados Unidos,
donde se han puesto a la venta inicialmente, ya hemos visto numerosos vídeos de la gente usándola donde no debería y
recordándonos el fenómeno 'glassholes'. El lanzamiento parece haber ido bien de momento, pero hay que tener cuidado, porque a Apple le crecen los enanos y
cada vez es más iPhone-dependiente.
¿Son las Vision Pro el nuevo iPhone de Apple? Personalmente no lo tengo nada claro, pero ciertamente son el producto tecnológico más sorprendente de los últimos tiempos y habrá que darles el beneficio de la duda. Hay ya conceptos que
nos acercan a la ciencia ficción con las Vision Pro, y solo queda esperar lo mejor no ya solo de este producto, sino de todo un segmento que se puede animar mucho y plantear una "disrupción menor". Una como la que ofrecieron el iPad —ahora
en horas (muy) bajas— o el Apple Watch. Que tampoco está nada mal.